martes, 17 de febrero de 2015

Adiós, bonita

Adiós, bonita

Si yo fuera una persona normal, nunca hubiera podido hacerlo.
Pero era un profesional, y mi trabajo era eliminarla.
—Te he estado utilizando desde el principio —le dije. No sonó bien, pero era cierto: habíamos pasado de todo juntos.
Tensé el dedo.
Bastaba con apretar una tecla: 
«Solo».
Había tenido un día crítico, pero no podía permitirme ningún error.

Misne, 15 de febrero de 2015 
(Dicotomías de una creadora/correctora)


Este es un micro que necesitaba plasmar, y que conecta mucho con mi estado actual. Soy de las que aprendió a poner el acento al «sólo» adverbial, independientemente del criterio de ambigüedad —que me parece muy ambiguo :-P—, y suelo escribirlo siempre con tilde. Qué le vamos a hacer, a mí me gusta así. Pero esta división entre lo que creo y lo que debo no puedo permitírmela a partir de ahora. Al menos, no como correctora profesional.

Algunos ya conocíais mi afición a corregir textos (que viene de lejos) y seguramente más de uno piensa que me debe un café ;-). Así que ahora ya lo sabéis: si no he dedicado tiempo a este blog últimamente es, en parte, porque este año académico he estado completando mi formación en Cálamo & Cran. Y puedo decir que me siento muy orgullosa de haber obtenido la certificación en Corrección profesional.

Es así como, finalmente, de mi dualidad entre el apego a la forma tildada y mi deber a la norma surgió este microrrelato. Y lo hizo sin avisar, prácticamente del tirón y con ese tono tan noir. Como juego de frases y palabras funcionaba: me sentía como un detective de novela que se ciñe al encargo de su cliente, o como uno de esos matones a sueldo, eliminando a «la chica» a pesar de lo que pudiera dictarle la conciencia.
Adiós, bonita es una especie de despedida con cierto aire pesaroso, un adiós a esa querida tilde. De ahí el título, inspirado en la famosa novela de Chandler Adiós, muñeca (cuyo título original, por cierto, era Farewell, My Lovely ;-))

Si os interesa saber más sobre la acentuación de la palabra «solo», en la Wikilengua hay un artículo muy interesante sobre la evolución de este me quiere / no me quiere de la normativa, junto con una buena lista de objeciones a la acentuación en caso de ambigüedad y a la norma de no acentuar la palabra:
http://www.wikilengua.org/index.php/solo_%28acentuaci%C3%B3n%29#cite_note-1

    Ojalá que la RAE hubiera optado por la otra decisión